No se anduvieron con tonterías. La Estación de Orsay, ahora museo, el Petit Palais, el Grand Palais y el Puente Alejandro III fueron construidos para la ocasión. También se alzó una gran noria en la avenida de Suffren. Tenía un diámetro de 100 metros y se demolió en 1937.
Además, durante esta exposición tuvieron lugar los Juegos Olímpicos de París 1900.
España estuvo entre los 58 países que participaron en tal evento y naturalmente trajo consigo un pabellón.
El pabellón de España, situado en el Muelle de Orsay, en las orillas del Sena, se hallaba próximo al de Alemania y enfrente del de Mónaco.
El pabellón era de estilo renacentista español y sus detalles se tomaron de diferentes monumentos históricos, como la fachada de la antigua Universidad de Alcalá, el Alcázar de Toledo, la Universidad de Salamanca o el Palacio de los Condes de Monterrey. El interior tenía un gran patio de columnas, con galerías en los dos pisos, igualmente de estilo Renacimiento.
El pabellón español se destinó para la Comisaría Regia y para exposición de arte en las que se presentaron algunas de las maravillas que encerraban nuestras residencias reales, como las colecciones de tapices de la Corona. También se expuso patrimonio procedente de los museos nacionales y museos particulares.
Por su parte, el inventor español y catedrático de Física Eugenio Cuadrado Benéitez acudió a la exposición para presentar su «Excitador Eléctrico Universal», bautizado como «la Centella», así como los resultados de sus trabajos de investigación que fueron internacionalmente reconocidos, resultando galardonado con una Medalla de Oro.
Momento ChipsEl precio de la entrada para la Exposición Universal de París de 1900 era de 1 franco.
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